Hoy en nuestra Tertulia,
continuamos con la sección “De tertulia entre amigos”, en la cuál, a través de
un cuestionario, conoceremos los gustos y preferencias en lo que a la Semana Santa
Nombre.
Pedro Guillén Labalsa.
¿A qué
Hermandades perteneces?
A la Cofradía del Señor Atado
a la Columna
de Zaragoza, a la
Agrupación de la Flagelación de la Cofradía California
de Cartagena y a la
Hermandad de la Sagrada Columna y Azotes de Sevilla.
Una razón o
más por las que eres cofrade.
Desde niño he
vivido con pasión los días de la Semana Santa , por supuesto por unas fuertes
convicciones, también porque es una tradición que todos debemos cuidar y además
porque es un signo externo más de nuestra religiosidad.
Un rincón
especial para ti en Semana Santa.
En los últimos
años que toqué el bombo en mi Hermandad zaragozana, la segunda capilla del
lateral izquierdo la nave de Santiago el Mayor, era el lugar donde me colocaba
el bombo y el tercerol, todo un ritual, el lugar donde, como solemos decir
Virginia y yo, te echas “el trapo” a la cara y tu mundo existe a través de esos
dos agujeritos y todo cambia.
A la hora de
ver Cofradías, ¿prefieres quedarte en un sitio fijo a esperarlas o por el
contrario te gusta ir a buscarlas?
La verdad es
que procuro verlas en función de la Hermandad y su recorrido, pero por lo general
prefiero ir a buscarlas.
¿Qué no te
perderías?
¿Con la salida
de qué Cofradía te quedas?
La de la Borriquita en Zaragoza
y la salida del San Pedro desde el Arsenal de Cartagena.
¿Y con qué
entrada?
La del
Silencio en Zaragoza es espectacular, San Pablo ha sido siempre mi parroquia y
eso tira mucho.
No entiendes la Semana Santa
Virginia, mis
amigos, mis hermanos, sin un sentimiento de hermandad verdadero entre todos los
cofrades y alejado de odiosas comparaciones que tanto daño acaban haciendo.
Qué te
consideras más ¿Cristífero o Mariano?
Vaya preguntita
amigo, más cristífero, la verdad. Contemplar a mis Cristos flagelados de Pepe
Hernández, de Mariano Benlliure o de Francisco Buiza es lo que más me ha inspirado
en distintos momentos de la vida.
Además de las
Imágenes devocionales de tu Hermandad, ¿qué otras advocaciones te gustan de una
forma especial?
El Nazareno,
el Ecce Homo, Jesús de la
Agonía , Jesús de la Humildad y María Santísima del Dulce Nombre, de
la que he sido costalero, en Zaragoza; el San Pedro y la Virgen del Primer Dolor de
Cartagena; y en Sevilla, especialmente el Nazareno del Silencio y el de la O , el Cachorro, el Gran Poder,
el Cristo de la Conversión
del Buen Ladrón, Jesús del Silencio en el desprecio de Herodes, Expiración del
Museo, el Cristo de la Salud
de la Carretería ,
la Soledad de
San Lorenzo y el Gitano.
Prefieres las
Procesiones, ¿de día o de noche?
Sin duda, de
noche.
Si tuvieses
que asistir a una Semana Santa que no fuese la de Sevilla ni la de Zaragoza,
¿dónde irías?
Tampoco tengo
dudas, a Cartagena.
Tanto las
Procesiones como las propias Cofradías, aun manteniendo la misma esencia, han
ido evolucionando a lo largo de los siglos, ¿cómo te imaginas la Semana Santa
No lo podría
decir con certeza, pero espero que siga siendo una Semana Santa, y sus
Hermandades, con fe, devoción y solidaria, porque si es así da igual cómo sea,
tal como dices, todo evoluciona, pero sin esas tres premisas seríamos sólo
folclore y tradición localista.
Un aroma de la Semana Santa
Aunque suene a
tópico, el olor del incienso, pero el puro, sin mezclas.
Y si hablamos
de olor, no nos vamos a quedar sin el sabor, así que… ¿qué te gusta comer en
Semana Santa y dónde?
Después de
visitar la sede de la Sangre
de Cristo, el Viernes Santo por la mañana, un chocolate con churros en la calle
Prudencio, en Zaragoza; en Sevilla, hay que tomarse una cervecita y unas gambas
en La Grande ,
junto a la Capilla
de la Estrella ;
y en Cartagena y de madrugada, una láguena y un reparo no pueden faltar para
levantar el ánimo cuando el relente te sube por las piernas.
Y ya para
terminar, y puesto que estamos entre tertulianos, ¿qué es lo que más te gusta
de nuestra Tertulia?
Todo. Somos
amigos y hermanos, o hermanos y amigos; somos una mezcla de Hermandades, que en
algún caso compartimos pero en otros no; sabemos ser críticos en primer lugar
con lo particular de cada uno, pero también sabemos serlo con respeto sobre las
Hermandades que no son la nuestra, lo que nos ha conducido en numerosas
ocasiones a reflexiones y conclusiones muy interesantes; la ilusión por unas
creencias y proyectos comunes; ha sido lugar de encuentro y reencuentro;
aprendemos los unos de los otros, no sólo de Cofradías, sino de cualquier
aspecto de nuestra vida cotidiana; y podría seguir…
